En este nuevo módulo del curso se nos piden un par de reflexiones en nuestro blog sobre algunas cuestiones (la eficacia de las medidas organizativas y sobre las metodologías activas). Me pondré a ello en breve pero, acabo de ver los vídeos de esta unidad y ha sido la gota que colma un vaso que se venía llenando con sentimientos contradictorios desde que comencé el curso. Decía Flaubert que "es necesario siempre esperar cuando se está desesperado, y dudar cuando se espera". Pues bien, llegados a este punto del curso tendré que esperar y me asalta la duda.
Cuando me enteré de que Educamadrid convocaba un MOOC acerca de la convivencia en los centros educativos, no me lo pensé. Creo que la convivencia es uno de los desafíos diarios que tenemos los docentes. Un paso más en lo que, personalmente, creo que es nuestro mayor reto: la atención a la diversidad.
Así que me inscribí junto a muchos otros compañeros/as y amigos/as tanto de mi centro escolar como de otros, con ilusión y muchas expectativas. Voy al grano:
- el título del curso es "Mejora de la Convivencia y prevención del acoso escolar" pero creo que el hashtag elegido, #ConvivenciaMooc, no es adecuado al desarrollo del curso: ni a las tareas propuestas, ni a lo que cuentan los vídeos, ni a muchos de los miles de comentarios y recursos compartidos por los grupos creados en Facebook y Twitter. Quizá hubiera sido más acertado el hashtag "#AcosoMooc". Porque el centro de atención se está poniendo en el acoso escolar más que en la convivencia.
Esta misma tarde acabo de escuchar un vídeo que habla de los espacios comunes y de la importancia de la vigilancia de los cambios de clase, de los recreos, del comedor... pero insistiendo en que "el profesorado que vigila el patio esté informado de los alumnos acosados" más que a generar espacios para mejorar la convivencia. Al hablar de las estrategias organizativas, se habla de "agrupar a los niños acosados en un mismo grupo con un tutor sensible al acoso" (una medida que me parece demencial aunque le pongan el bonito nombre de "grupo colchón" . Y, por cierto, ¿de verdad hay tutores insensibles al acoso?). Será que soy un ignorante, lo admito, y si los "expertos" doctos en estas lides lo dicen, será así pero, perdónenme, yo no lo veo.
Solo después se ve la luz al final de este túnel y se habla de metodologías activas como un aspecto a reflexionar para mejorar la convivencia en las aulas y prevenir conductas indeseables. ¡Qué gracia!: hablar de metodologías activas mientras se dictan normas y leyes que convierten las clases en poco más que un entrenamiento para pasar pruebas externas que nos dejen bien en algún "ranking"
Me pregunto si tendrán algo que ver las múltiples noticias que salen en la prensa, la "campaña" publicitaria de la Consejería de Educación en televisión (y hasta en las salas de cine, como comprobé ayer) y que es una manera de justificar "que se está haciendo algo".
Esta misma tarde acabo de escuchar un vídeo que habla de los espacios comunes y de la importancia de la vigilancia de los cambios de clase, de los recreos, del comedor... pero insistiendo en que "el profesorado que vigila el patio esté informado de los alumnos acosados" más que a generar espacios para mejorar la convivencia. Al hablar de las estrategias organizativas, se habla de "agrupar a los niños acosados en un mismo grupo con un tutor sensible al acoso" (una medida que me parece demencial aunque le pongan el bonito nombre de "grupo colchón" . Y, por cierto, ¿de verdad hay tutores insensibles al acoso?). Será que soy un ignorante, lo admito, y si los "expertos" doctos en estas lides lo dicen, será así pero, perdónenme, yo no lo veo.
Solo después se ve la luz al final de este túnel y se habla de metodologías activas como un aspecto a reflexionar para mejorar la convivencia en las aulas y prevenir conductas indeseables. ¡Qué gracia!: hablar de metodologías activas mientras se dictan normas y leyes que convierten las clases en poco más que un entrenamiento para pasar pruebas externas que nos dejen bien en algún "ranking"
Me pregunto si tendrán algo que ver las múltiples noticias que salen en la prensa, la "campaña" publicitaria de la Consejería de Educación en televisión (y hasta en las salas de cine, como comprobé ayer) y que es una manera de justificar "que se está haciendo algo".
- participamos unos 4000 docentes: he de decir que no me sorprendió. He participado en otros MOOCS organizados por Educalab INTEF: sobre PISA, Competencia Digital, el programa de colaboración escolar eTwinning, Narración Digital, Aprendizaje Cooperativo... y en todos ellos no creo que se haya llegado ni a la mitad (sí los inicialmente inscritos pero no en los que finalizan el curso completo). ¿Qué podrá haber despertado tanto interés en este primer MOOC de Educamadrid?.
Seamos sinceros: que da la oportunidad en apenas dos meses de conseguir 2 créditos de formación que necesitamos en Madrid para cobrar los sexenios. Pensemos que por participar en un Grupo de Trabajo o un Seminario durante 8 meses de curso escolar, puedes recibir 2 o 3 créditos. Los MOOCs de INTEF "tan solo" otorgan una insignia digital, una especie de certificación digital de aprovechamiento del curso pero no las horas y, por tanto, sin efectos económicos, por lo que se hacen por puro interés formativo. Que conste que no lo critico, me parece genial que cada uno se forme cuando y como quiera y no seré yo el que valore los motivos que tiene cada uno para hacer un curso. (para una vez que podemos hacer lo que nos da la gana...)
En cierto modo, este MOOC de Educamadrid desvirtúa el sentido original de los "cursos masivos abiertos en red": fomentar la interacción y comunicación entre docentes, compartir experiencias y buenas prácticas, generar comunidades, crear y difundir productos basados en la colaboración por docentes que deciden compartir un camino formativo sin otra meta que aprender y enriquecerse de las prácticas de otros como medio de desarrollo profesional. Parafraseando el dicho sobre el dinero: "quienes creen que los créditos lo hacen todo, terminan haciendo todo por los créditos".
Espero que Educamadrid, a partir de ahora, reconozca con créditos todos sus MOOCs, no solo este sobre el acoso, y todos sus cursos y no solo algunos de "especial dedicación" como era hasta ahora (un ejemplo: solo se reconocen los crédito en una actividad como el Concurso de Recitado de Poesía de la Comunidad si se llega a la final. ¡Bonita manera de valorar el esfuerzo y la dedicación!)
Seamos sinceros: que da la oportunidad en apenas dos meses de conseguir 2 créditos de formación que necesitamos en Madrid para cobrar los sexenios. Pensemos que por participar en un Grupo de Trabajo o un Seminario durante 8 meses de curso escolar, puedes recibir 2 o 3 créditos. Los MOOCs de INTEF "tan solo" otorgan una insignia digital, una especie de certificación digital de aprovechamiento del curso pero no las horas y, por tanto, sin efectos económicos, por lo que se hacen por puro interés formativo. Que conste que no lo critico, me parece genial que cada uno se forme cuando y como quiera y no seré yo el que valore los motivos que tiene cada uno para hacer un curso. (para una vez que podemos hacer lo que nos da la gana...)
En cierto modo, este MOOC de Educamadrid desvirtúa el sentido original de los "cursos masivos abiertos en red": fomentar la interacción y comunicación entre docentes, compartir experiencias y buenas prácticas, generar comunidades, crear y difundir productos basados en la colaboración por docentes que deciden compartir un camino formativo sin otra meta que aprender y enriquecerse de las prácticas de otros como medio de desarrollo profesional. Parafraseando el dicho sobre el dinero: "quienes creen que los créditos lo hacen todo, terminan haciendo todo por los créditos".
Espero que Educamadrid, a partir de ahora, reconozca con créditos todos sus MOOCs, no solo este sobre el acoso, y todos sus cursos y no solo algunos de "especial dedicación" como era hasta ahora (un ejemplo: solo se reconocen los crédito en una actividad como el Concurso de Recitado de Poesía de la Comunidad si se llega a la final. ¡Bonita manera de valorar el esfuerzo y la dedicación!)
- Por otro lado, para la Administración es una manera muy barata de afrontar la Formación del Profesorado. Por muy poquitos euros tiene ya coartada para argumentar que "han formado" a casi 4000 docentes y que les "preocupa" la Convivencia y el Acoso. La Formación del Profesorado, tanto inicial como continua, es demasiado importante como para entenderlo como gasto y no como inversión.
- La primera tarea "evaluable" ha sido un análisis de un caso de acoso o posible acoso a partir de los informes que se obtienen tras aplicar una determinada herramienta: una aplicación que se publicitó a bombo y platillo por la Administración Educativa de la Comunidad
pero que parece que se queda en "agua de borrajas", según ha reconocido el propio Consejero de Educación, Rafael Van Grieken y la Asociación Madrileña contra el Acoso Escolar. Esta aplicación presentada como "medidor online del acoso", no mide el acoso pero era (parece que es literal) "mejor hacer algo que no hacer nada".
(fuente imagen: noticia de Cadena Ser)
- Yo no tengo la solución. ¡Qué más quisiera! Pero sí tengo opinión. Todos los maestros y maestras trabajamos la convivencia escolar, nos ocupa y nos preocupa, estoy convencido de ello y seguro de que podemos hacerlo más y mejor.
1- Creo que el aspecto sancionador está suficientemente desarrollado. Las normativas de los centros educativos establecen protocolos claros para castigar conductas contrarias a la convivencia escolar. Los Reglamentos de Régimen Interno, la Comisión de Convivencia...No necesitamos nuevas leyes, basta con aplicar las que tenemos.
2- Sería importante actuar sobre las emociones. Esas que tantas veces obligamos a los alumnos/as a dejar en la puerta de la escuela para que las recojan cuando suena el timbre de salida. El bienestar afectivo no debe ser un objetivo educativo, es una condición previa para un aprendizaje eficaz. Un currículo desmesurado y unos estándares que perpetúan un aprendizaje memorístico no contribuyen a llevar a cabo proyectos dirigidos a mejorar valores de convivencia democrática o de tolerancia o a promover y generar espacios para la participación infantil y juvenil. Dedicamos mucho tiempo a resolver conflictos y muy poco en educar para la convivencia.
3- Lo mejor del curso, sin duda, la interacción de tantos docentes que compartimos, no solo una misma preocupación, sino también posibles soluciones, ideas, buenas prácticas, recursos.. que nos serán muy útiles. Pero ya hay cuentos que no me creo. Tras casi 30 años de docencia en la escuela pública no he visto muchas iniciativas por parte de la Adminstración dirigidas a mejorar esa convivencia, por poner algunos ejemplos:
- la disminución del número de alumnos/as por aula (hasta 30 en Primaria y más allá en los IES) porque las relaciones interpersonales tienen lugar en aulas masificadas.
- el aumento de las plantillas de profesores que permitan atender la diversidad de manera eficaz (¿casualidad que se recorte en especialistas en PT, AL, Compensatoria...?) o establecer "planes de vigilancia" como nos cuentan en esta unidad 3 olvidando cómo estamos en los colegios de la Comunidad.
- la resistencia a establecer Equipos de Orientación permanentes en los centros de Primaria (ahora solo acuden 1 día a la semana ¿cómo atender a los 700 alumnos/as de mi centro?, al menos en la escuela pública; de las otras prefiero no hablar).
- la sustitución inmediata de bajas, especialmente las prevista de antemano (bajas por embarazo, lactancia, ...). Quizá así tendríamos más tiempo para diseñar y aplicar estrategias y planes de mejora de la convivencia, ademas de cumplir con los apoyos que influyen también en el devenir de la vida cotidiana en las aulas.
- la formación del profesorado sistemática y profunda en metodologías activas y atención a la diversidad y la resolución de conflictos. El trabajo cooperativo, entre otros, basado en el respeto mutuo, la ayuda, la colaboración, exige tener en cuenta al compañero/a, escucharle y ser escuchado, ser tenido en cuenta, encontrar tiempos y espacios para vivir experiencias de éxito en el trabajo escolar, mejorar habilidades sociales, aumentar la autoestima ... y promover una escuela menos competitiva e individualista.
- la dotación de los centros, la multiplicación de recursos, porque la convivencia se desarrolla en un espacio concreto: nuestras aulas. Esas en las que conviven hacinados nuestros alumnos/as.
Por supuesto que comparto con todos/as la idea de que la violencia escolar (pero no solo escolar, también en los campos de fútbol, en las fiestas, en la calle, en la familia...) se ha convertido en una de las primeras preocupaciones de la sociedad y en un problema que debemos afrontar de manera global. No caben medias tintas ante el acoso o el maltrato, entendido en su sentido más amplio, del mero insulto a la agresión pasando por el rechazo o el aislamiento. Pero me niego a pensar que haya "docentes insensibles al acoso" como parece sugerir la Sra Serrano en el vídeo citado. Podrá haber decisiones más o menos acertadas porque nadie es infalible.
La Asociación Española para la Prevención del Acoso Escolar tiene buenas sugerencias al respecto. Ya decía Antonio Luengo (psicólogo y ex secretario general del Defensor del Menor) que "el acoso escolar no es un problema escolar, sino social", pero que se manifiesta en las aulas porque es donde más tiempo pasan los menores. "No se trata de un problema de la escuela o de su organización, sino de una sociedad que durante años ha estado visibilizando que la chulería, la arrogancia y el pasar por encima de los demás, es una manera de estar en la vida que te hace triunfar".
(merece la pena leer el artículo entero, tiene ya 12 años pero parece que no han cambiado mucho las cosas)
La Asociación Española para la Prevención del Acoso Escolar tiene buenas sugerencias al respecto. Ya decía Antonio Luengo (psicólogo y ex secretario general del Defensor del Menor) que "el acoso escolar no es un problema escolar, sino social", pero que se manifiesta en las aulas porque es donde más tiempo pasan los menores. "No se trata de un problema de la escuela o de su organización, sino de una sociedad que durante años ha estado visibilizando que la chulería, la arrogancia y el pasar por encima de los demás, es una manera de estar en la vida que te hace triunfar".
Y termino, que me estoy alargando, y lo hago con unas palabras que leí hace tiempo pero que resuenan ahora con más fuerza:
Una escuela de calidad, una sociedad de calidad en la que merezca la pena vivir, sólo es posible con adultos de calidad que ejerzan (sin esconderse) desde el ámbito o desde el papel social que les corresponda. Adultos que por su forma de vivir convenzan, contagien a niños y a adolescentes (y a otros adultos también) de que hay una manera de relacionarse con la vida y con uno mismo que merece la pena aprender, por la que vale la pena esforzarse.
(Lourdes Bazarra, Olga Casanova, Jerónimo García Ugarte. El País, mayo 2004)
Una escuela de calidad, una sociedad de calidad en la que merezca la pena vivir, sólo es posible con adultos de calidad que ejerzan (sin esconderse) desde el ámbito o desde el papel social que les corresponda. Adultos que por su forma de vivir convenzan, contagien a niños y a adolescentes (y a otros adultos también) de que hay una manera de relacionarse con la vida y con uno mismo que merece la pena aprender, por la que vale la pena esforzarse.
(Lourdes Bazarra, Olga Casanova, Jerónimo García Ugarte. El País, mayo 2004)
(merece la pena leer el artículo entero, tiene ya 12 años pero parece que no han cambiado mucho las cosas)
Alto y claro
ReplyDeleteGracias, Montse. Quizá haya dicho en voz alta lo que muchos/as pensábamos en silencio. :)
DeleteEnhorabuena y gracias por tu reflexión!
ReplyDeleteConocí a Olga y a Lourdes en varios cursos y estoy totalmente de acuerdo con lo que dicen!
Un saludo
Gracias a ti por tu comentario. No he tenido la suerte de conocerlas personalmente pero el artículo me impactó desde que cayó en mis manos ¡y mira que ha pasado el tiempo!. Un saludo.
DeleteTotalmente de acuerdo, expresas todo lo que siento y no sé expresar. Es muy triste, pero que muy triste.
ReplyDeleteMuchas gracias, tienes mi apoyo total.
Gracias Loles, la verdad es que no me siento contento de escribir esto (sí de expresar libremente lo que pienso y siento). Tienes razón, es triste que en un tema como este no se nos trate como profesionales de la educación. Quizá esa tristeza refleje la importancia que le damos a la convivencia y al bienestar afectivo de nuestros niños y niñas. Un saludo y gracias por el comentario.
DeleteTotalmente de acuerdo contigo, Los docentes día a día ponemos todas las herramientas disponibles a nuestro alcance para intentar solventar todas las dificultades personales, sociales, conductuales y de aprendizaje de nuestros alumnos, ademas de todo lo que la sociedad nos demanda en cada momento. Y nosotros, los docentes, a quién podemos demandar ayuda, medios, formación.....Y reconocimiento y respeto, a quién?.
ReplyDeleteGracias por asomarte a este blog y por tu comentario,María José. Tienes razón, la función de la escuela se está volviendo inabarcable, entre otras cosas, porque eso que demanda sociedad y que tú cuentas no es lo nos demanda la Administración. Las políticas educativas hace tiempo que abandonaron el barco: politiqueo, burocracia, zancadillas, contradicciones... todo envuelto con frase tan bonitas como inútiles. Un saludo.
DeleteMuy buena reflexión y creo que es la opinión de muchos tanto del curso como de los problemas sociales a los que nos enfrentamos, un aplauso para ti!
ReplyDeleteGracias, Sandra. Alguien tenía que decirlo. El aplauso para todos los que hemos decidido emplear nuestra vida en la enseñanza. Yo debo todo a mi esfuerzo pero también al debate, la reflexión y la aportación de muchos compañeros y compañeras. Educar se conjuga siempre en plural. Un saludo y gracias por asomarte a este blog.
Delete¡Cuanta verdad!
ReplyDelete¡Cuanta verdad!
ReplyDeleteMuchas gracias por el comentario. A pesar de llevar unos cuantos años en la docencia, todavía peco de ser bastante ingenua. Mi visión del curso era muy positiva pero ahora reconozco que no es oro todo lo que reluce. Por mi parte intentaré hacer todo lo posible y, sobre todo, algo que sí que tengo muy claro que es seguir en mi empeño de formar buenas personas y buenos ciudadanos. Sé que, por desgracia no todos, pero hay muchos compañeros por ahí que lo intentan cada día y se dejan la piel.
ReplyDeleteUn saludo
Hola, Ali. Gracias a ti por tu reflexión y por asomarte a este blog. El curso puede ser positivo (ya que estamos...veamos la parte positiva) pero cambiaría mis dos créditos ahora mismo a cambio de esas iniciativas de la Administración que nombro en el post y que echamos tanto de menos en los centros. Tú animo para seguir en ese empeño es el mío y el de muchos y muchas docentes que como bien dices nos dejamos la piel cada día (a pesar de todo). Un saludo.
Delete!Qué razón tienes en todo lo que dices!
ReplyDeleteGracias, "Ventura". En todo no lo sé pero tenía que decirlo. ¡Qué bien se queda uno cuando expresa lo que siente con libertad! Tú lo sabes bien, ¿verdad?
Delete¡ Bien dicho !
ReplyDelete¡ Bien dicho !
ReplyDelete¡Gracias!
DeleteMuy clarito, si señora.
ReplyDeletePerdón Señor. jeje.
ReplyDeletelo he intentado aunque había tantas ideas que hervían en la cabeza y tantos sentimientos encontados que no ha sido fácil ordenarlos. Un saludo.
DeleteTotalmente de acuerdo.
ReplyDeleteMenos vigilancia y más convivencia.
Hola, Bego, gracia por asomarte a mi blog. La vigilancia es una tarea importante pero incompleta. Nuestra tarea no puede quedarse, como tú dices, en vigilar sino en educar para la convivencia de una manera activa y sistemática. Somos educadores y no vigilantes de seguridad. Un saludo.
DeleteMuchas gracias Javier por tus palabras. A mí también me rechinaban vaias cosas y no hubiera sabido expresarlo mejor. Por cierto, no se menciona en todo el curso a la figura del PTSC, que acda vez pasamos menos horas en los centros y que considero clave en las tareas de Mejora de la Convivencia.
ReplyDeleteHola, Susa. Gracias por tu comentario. Tienes razón, la figura del PTSC está ausente en este curso, como tantas otras cosas. Supongo que la razón será que el curso tenía otros "objetivos". Triste, muy triste.
Delete